sábado, 11 de octubre de 2014

Para la crisis de desempleo: propuestas empresariales prácticas


                                                                                                Carlos Ml. Muñoz J.


Es evidente, cómo la sociedad del Siglo XXI se enfrenta a  una crisis cada vez más grande y turbulenta en cuanto a poder adquirir los recursos necesarios para la subsistencia. Junto a ella, hoy camina la herencia de lo que el capitalismo construyó, lo que el egoísmo y la burocracia heredaron a sus hijos, esto puede tener un nombre muy claro: pobreza.

El Desempleo, amigo íntimo de la pobreza, crece imparablemente y no puede detenerse debido a que los  proyectos de inversión se  disminuyen a causa de riesgos evidentes que implica llevar a cabo propuestas poco factibles. Y el Estado, sinónimo de incapacidad, no opta por crear fuentes viables de proyectos que promuevan el Desarrollo Comunal, así que, queda un vacío de solución que se refleja en la falta de trabajo.

Es evidente que la sociedad, en general, no se encuentra preparada para enfrentar la crisis; cuando esta en su debido momento se acentúe, miles de personas, correrán como una manada desbocada   y sin rumbo, correrán de miedo.

Ante lo anteriormente dicho, existe, sin embargo, la posibilidad preventiva de atenuar o de ganarle a la crisis, esta es la puesta en práctica de propuestas empresariales que de alguna manera puedan generar empleo, a corto, mediano y largo plazo, para ser claros,  las propuestas deben de acompañarse de  encadenamientos productivos eficientes que  formen empleo.

Una sociedad con trabajo tendrá recursos al menos suficientes para poder seguir adelante, la falta de empleo, además, promueve estados críticos de malestar social y esto afecta la vida en armonía.

Regularmente, nos infunden la idea del desempleo como algo “per se”, o sea como algo que sucede naturalmente, sin embargo, no es cierto, el desempleo es una consecuencia  de la falta de ocupación que es generada por las costumbres y usos sociales que van en detrimento de una sociedad (falta de emprendimiento, estado paternalista, egoísmo, falta de originalidad, politiquería, etc.).  Las sociedades que por destino de la vida y de la historia han tenido que enfrentar crisis a causa de: hambruna, guerra, pandemias, etc., hoy por hoy mantienen costumbres que motivan el espíritu emprendedor, el individuo de estas sociedades es consciente de su responsabilidad para tener y llevar una buena vida.

Es en una una gran medida, la falta del accionar práctico de una sociedad la que la somete a “fábulas mentales”, parecido a un enfermo de psicosis, una sociedad puede creer como verdadero algo negativo, en español, creer que está haciendo algo y no está haciendo nada, creer que no hay pobreza mientras crece desbordándose.

A las alturas del Siglo XXI, sin embargo, las crisis internacionales que suceden son evidencia de un problema que poco a poco se “come” al Mundo, ese problema, debe ser resuelto. Así, es como las soluciones al problema deben de darse en un marco de acciones prácticas que puedan sostenerse (financieramente) y replicarse (socialmente) de  manera que ayuden a mitigar y a resolverlo por la vía rápida.
  
El único requisito para poder llevar a cabo la tarea, es que las personas, decidas y alentadas por la urgencia, opten por muy valientemente ser parte de un ejército de emprendedores. Es absolutamente cierto que tampoco deberán desbocarse en una aventura suicida, esta misión la deberán de llevar a cabo con la complicidad de una estrategia que les asegure el éxito.

Las propuestas empresariales entonces, deben de tener como ejes centrales: uno de índole práctico y otro de índole financiero, de tal manera que  puedan sobrevivir al mercado y logren multiplicar sus ramas conforme avancen en el tiempo, transformándose así en algo estable. Las propuestas “no prácticas” deben desestimarse pues su camino conduce al fracaso económico.

Nos acostumbraron a pensar y a creer que “las cosas nacen de los árboles”, que el dinero nace de los bancos y  que los bienes de las fábricas, y así en todo, muy poco nos han aclarado que todo deviene de un proceso. El trabajo, de igual manera es un proceso el cual básicamente se trata de que exista un trabajo por hacer y de que se necesiten personas para llevar a cabo ese trabajo, el contratante quien con su trabajo involucra a otros, es el que promueve que existan puestos de trabajo. Es evidente entonces que el trabajo es promovido por el comercio, debido a que cada puesto comercial necesita de empleados para poder operar, es claro entonces que la necesidad de emprendedurismo se ve revelada en ésta evidencia; el camino hacia la generación de emprendedores es por el que se debe de optar.

Es un hecho que no todos nacieron para ser jefes, esa es una cualidad que nace como vocación en las personas que naturalmente son mas independientes que las demás y en las personas que buscan encontrarle un sentido a la vida que sea acorde con los intereses de ellos y de su pensamiento, otras personas son evidentemente más pasivas y desean llevar una vida menos llena de imprevistos; de las dos clases de personas se nutre la sociedad. Es en la medida que se combinan los intereses de ambas   (clases de personas) que se crea la convivencia.

En el sentido de la Justicia lo que ha sucedido es que la explotación de parte de empleadores, quienes han explotado a gran escala, desató un sistema que ha exigido la sobrevivencia del mas fuerte,   que además, fué impulsado muy fuertemente por  el egoísmo y el individualismo, digamos que se extralimitaron las condiciones de empleo en favor de unos pocos ricos; sin embargo en un sistema ideal de intercambio de trabajo, la relación equilibrada  contratante-contratado, es muy positiva.

Volviendo al tema que expongo, el emprendedor, el empresario, pequeño y grande, con su olfato y valentía natural puede ser capaz de diferenciar una propuesta práctica de una “no práctica”, y una vez hecho esto el camino estará listo, el objetivo estará en la mira.

No describo ¿cuales propuestas? ni la manera de cómo las van a a financiar, por que los emprendedores, los misioneros, los guerreros, siempre saben como ingeniárselas para obtener lo imposible (lo invisible). Hayá cada quien con su estrategia, todos los caminos -como dicen- les llevará a Roma.





martes, 24 de junio de 2014

Pedagogía para una Democracia horizontal

                                                                                                   
Carlos Ml. Muñoz J.
  

          
El ejercicio del poder habitualmente se piensa desde una óptica vertical, lo que nos hace creer que las órdenes deben de provenir de un sistema burocrático escalonado desde la plataforma organizativa política. Quiero decir que la toma de decisiones se lleva a cabo desde una condición vertical, así las cosas pues para llevar a cabo esa desición política es necesario que desde la parte mas alta organizativa del partido se proponga la idea para que ésta al final se lleve a cabo,  en su defecto, la orden podría haberse sugerido desde una propuesta de base, pero deberá de pasar su debido y riguroso proceso de aprobación ejecutiva.

Este tipo de ejercicio es habitualmente cierto si seguimos pensando como “ciudadanos que delegan el poder”. Aclaro que esta manera de proceder es evidentemente democrática pués se requiere de un procedimiento de elección en asamblea, escalonado, para lograr la representación deseada, representación que como dije antes toma las decisiones.

Ahora, me paro en el siglo XXI, siglo en el cual la comunicación y el conocimiento, liberado gracias a la tecnología están a disposición del ciudadano común, o sea que no solamente quienes hacen las propuestas y los acuerdos de orden superior conocen del tema a fondo, si no que el ciudadano común puede también con un poco de disposición a la investigación, conocer y de esa manera tener un criterio propio, ese criterio le permite, en todo caso, tener la posibilidad de tener incidencia sobre alguna situación que este desease intervenir, esto de una manera aunque fuera mínima.

El conocimiento es poder, la información es poder, decenios y siglos anteriores, las masas fueron manipuladas fácilmente debido a que quienes detentaban el poder tenían el poder de conocimiento, de tal manera que limitaban la información que deseaba que la ciudadanía conociera, eso les dió la posibilidad de dirigir con mucha facilidad lo que los sociólogos llaman “imaginarios sociales” o “imaginarios colectivos”. Dichos, vistos desde una perspectiva del control del poder, son los que pueden determinar con cierta certeza el escabroso direccionamiento de una sociedad, y de los opositores al  poder. Aún así a este incipiente siglo XXI todavía las grandes Compañías de información controlan “la verdad” y llevan a cabo mecanismos de control, evitando a la sociedad, en medio de las redes sociales por ejemplo, la información política un poco quisquillosa, que en manos del conocimiento general pues llevaría a la sociedad a tener otras actitudes más disconformes y desconfiadas, cosa que iría en sana contradicción con los intereses de gobernar la información.

Es evidente que el potencial de las redes sociales no es una cuestión decisiva, por que solo el potencial no lleva acabo ningún cambio, el cambio se dá, si las redes se aprovechan y la ciudadanía organiza sistemas de información opcionales que incidan en los demás ciudadanos y ciudadanas, al no ser así ese potencial es cosa muerta, sin embargo existente. Esto que digo ya posee pruebas y la mas relevante es la reciente primavera árabe que ha empujado a una serie de golpes de estado en los últimos 3 años en la región del norte de África y del Medio Oriente.

Bueno, pero parece que todo la anterior no se relaciona con el tema en discusión cual es la Democracia horizontal, puesto que lo que expongo es una serie de acontecimientos que según mi parecer liberan el conocimiento y que por lo tanto ese conocimiento liberado liberaría al Poder, esa es la tesis. ¿Por qué Democracia horizontal entonces, a qué me refiero?

Hay una ola de información que está definitivamente transformando al Siglo XXI, esa ola para decirlo claramente se llama: las redes sociales (facebook, twitter, whatssap,etc.), aunque hoy se trabaja con un nivel muy alto de dispersión, dichas redes de una manera u otra comienzan definitivamente a influir sobre las acciones de la sociedad.

La Democracia horizontal podría definirse en todo caso, como “aquella en donde la acción organizada, representa los intereses de los acuerdos y necesidades estratégicas de la base política o sea de que representa efectivamente a esa célula política que se reúne semanalmente a acordar y diseñar acciones. Más es evidente que los esfuerzos deben de coordinarse para que no sucedan una lluvia de esfuerzos aislados sin dirección, es aquí donde la alta jerarquía política debe de coordinar. La idea central de la premisa horizontal es que se podrá tener el control político de áreas mas pequeñas, de una manera mucho más sencilla, dándole poder a la célula que en todo caso es la que posee la información clave (auténtica) para definir las acciones de su sociedad.

Existe otra premisa pero de una índole mas existencial, filosófica, que debe de pensarse a nivel general; me parece que deberá de agregarse al razonamiento transversal que se realiza comúnmente en la ciencia política. La libertad de acción, que difiere del concepto jurídico de libertad, el cual entiende a la libertad al tenor de aquella otra permisa (dicha por Sartre) que habla de que la “libertad mía termina donde empieza la libertad del otro”, y por supuesto si dicha no infringe las normas establecidas por el sistema jurídico. La libertad de acción, trascendiende la época contemporánea, esta es: “la capacidad que tiene todo ser humano de elegir a consciencia, sin coersión ni coacción, cualquier acción que desee llevar a cabo”; esto nos empujará definitivamente a otra concepción de la organización política por cuanto entenderemos (al fin), que no es posible por ninguna teoría o filosofía ordenar estratégicamente las acciones de un todo social, la acción política por más diseñada que esté hecha, llevará siempre la razón de la libre elección; la coacción a través de esclavitudes y ejércitos es la única que ha podido mantener los modelos políticos.


La organización siempre será la clave de la Democracia, en los escritos de Lenin, por ejemplo, se habla abultadamente sobre éste tema, casi haciendo de esta -la premisa organizativa-, todo el eje de la discusión. Esa organización debe de llevar a cabo sus actos de manera que sean incidentes, efectivos, para con sus intereses, la estrategia de incidencia es la que debe de elaborarse con más detenimiento, llevando a cabo bitácoras de fiscalización de incidencia y proyecciones de incidencia entre otros. La educación científica, única capaz de decodificar los mensajes de libertad, debe de acompañar los procesos organizativos, cuales deben de engendrarse en discusiones dialécticas generadoras de dudas e incertidumbres que permanente deben de resolverse (como un gran juego matemático o un rompecabezas), así las razones que ordenen una sociedad deben de encajar completamente; la razón estará al lado de las personas sabias.

Nuestro Mundo contemporáneo (Utilitario) entiende por organización, la manifestación en conjunto gigantesca, las inmensas masas moviéndose al son de un gran Gong Campana que dicta la orden. La Democracia horizontal, debe de entender por organización cualquier grupo (de pequeño a diminuto) que sea capaz de incidir políticamente; desde cinco personas recogiendo la basura de los alrededoes del parque que semanalmente se ponen de acuerdo para ir todos los jueves a las 5 p.m. después del trabajo, hasta las tres o cuatro personas que formen grupos de enseñanza para elaborar encuentros populares de conocimiento, raquíticamente humildes donde talvez solo se agreguen 4 o 5 personas; esa es la organización, pues entiéndase que cada gota de acción que se agregue a las acciones grupales de un grupo que evidentemente persiga fundamentos que se alíen con otros grupos, o que si hablamos de un partido político, se agregan con la misma filosofía política, esa gota de acción sumada por miles, será tan eficaz como miles haciendo miles de cosas.

La organización es la compañera fundamental del éxito, y la organización con un sentido estratégico es la compañera fundamental del éxito de un grupo.
Las pasadas elecciones nos vuelven a enseñar nuestra gran falla como colectivo que trabaja para llevar a cabo el mensaje democrático, no hemos sido capaces de generar una organización permanente que se disponga siempre a velar por los asuntos de índole política, que se disponga a organizar acciones democráticas si se quiere decir mejor de esa manera. Esta poca constancia, para los intereses de una Democacia horizontal es una gran debilidad, por que la capacidad de articulación se disminuye al -50%, debido a que la estrategia de incidencia se descontinúa y terminamos desorganizados e incapaces de generar más y mejores acciones, que paulatinamente, si hubieramos sido constantes, pues con toda esa cartera de estadísticas y con toda esa fuente de información ya ordenada, y con una serie de grupos preparados para seguir con un método cada vez más depurado, estaríamos siendo capaces de adecuar estrategias, seríamos evidentemente una organización bastante poderosa; la capacidad de acción es la que puede valorar finalmente la capacidad del Poder político. Y no es Poder en téminos estériles - egocéntricos, es Poder en términos de efectividad en pro evidentemente de nuestros ideales. De ahí que la organización de las diminutas acciones permanentes sea también una clave para esa Democracia horizontal que desea controlar el Poder.

El Poder horizontal de la Democracia no es más que ese ideal al cual el término mismo en su etimología hace referencia, o sea el “demos-kratos (Poder para el Pueblo)”; si reelemos con atención lo anteriormente expuesto (párrafos anteriores) se describe atentamente las características de una sociedad abiertamente democrática y de un orden político (Partido en su defecto), perfectamente democrático, esa condición que antes esbocé de la libertad previa de todos los seres humanos, califica de una manera objetiva el hecho de que la sociedad debe de erigirse sobre sí misma, a cuenta indiscutible de su propia guía y razonamiento, junto a la libertad para que sea sublime, deberá de estar como un guía el conocimiento cual deberá de generarse a través de discusiones dialécticas.

El Poder horizontal, viene siendo la última etapa que dispondrá la transición inevitable de los órdenes jerárquicos verticales a la Democracia absoluta, que podría conflagrarse gracias a la revolución de la comunicación de este Siglo XXI.
                                                                                  

martes, 18 de febrero de 2014

Maíz Bt: algunas consideraciones


Ing.Agr. Claudio Vargas Rojas



Las plantas genéticamente modificadas utilizan la vía de expresión de toxinas Cry derivadas de los genes de Bacillus thuringiensis Berl. (Bt) (Salvatore 2002), estás han sido creadas para tratar de resolver una serie de problemas como la resistencia a plagas y enfermedades. Sin embargo, a pesar de las eventuales e hipotéticas ventajas que podría traer el uso de estas plantas genéticamente modificadas, no pueden ser liberadas comercialmente sin antes haber sido objeto de un estudio riguroso que garantice la seguridad, tanto para el hombre como para el medio ambiente.
El riesgo que conlleva el uso de organismos transgénicos debe ser analizado con rigor ya que puede tener efectos detrimentales para la salud humana, el medio ambiente y la biodiversidad. En lo que al medio ambiente respecta hay que tomar en cuenta que son productos "nuevos" en la naturaleza, que irrumpen en la misma sin haber pasado por un proceso tan importante como lo es la evolución, ya que son resultado de procesos de ingeniería genética, no del actuar de la naturaleza. Algunos los posibles riesgos son: que las toxinas Cry puedan afectar a insectos benéficos; que estas puedan acumularse y persistir en el suelo; o bien que surjan insectos plagas resistentes al Bt y que esta resistencia a la ampicilina del maíz Bt pueda ser transferida a organismos patógenos, derivando en la aparición de súper plagas (Ortega s.f.).
Si bien las toxinas Cry derivadas del Bt trabajan con cierta especificidad, el efecto tóxico de los cristales puede afectar a otros grupos de insectos no relacionados con el cultivo. Las proteínas Cry se cristalizan en los granos de polen y son dispersadas por el viento, resultando tóxicas para otros insectos cercanos al cultivo (Sánchez 2008; Salvatore 2002).
Se ha denunciado que el polen del maíz transgénico tuvo efecto significativo sobre las poblaciones de la mariposa monarca, ya que llego a hasta plantaciones de algodón, donde afectaba a las larvas de la mariposa, reduciendo considerablemente su población. Y aunque se ha documentado que estas biotoxinas no tienen efecto sobre otros grupos de insectos como polinizadores y dispersores, la especificidad no es absoluta (Sánchez 2008).
Por su parte Hilbeck et al. (1998) realizaron experimentos donde se evalúo el efecto del polen sobre crisopas (depredadores de insectos plaga). Encontraron que si el polen y la crisopa se encuentran en contacto el insecto muere debido al efecto de la proteína Cry1Ab contenida en el polen, sin embargo, esto ocurre solamente cuando se encuentra en altas concentraciones; cuando la toxina fue suministrada por medio de insectos afectados, menores concentraciones de la toxina dieron similar porcentaje de mortalidad.

En lo que respecta al suelo, los cultivos producen proteínas Cry en sus tejidos, dichas proteínas son liberadas al campo a través de exudados radicales, polen y residuos de cosecha (Saxena et al. 1999; Saxena y Stotzky 2000; Saxena et al., 2004; Stotzky 2004; Icoz and Stotzky 2008; Li et al. 2009; citados por Cheeke 2012). Una vez liberadas en el suelo las proteínas Cry se pueden adherir a partículas de arcilla o humus, lo que retarda su degradación. Más aún, se ha demostrado que las proteínas adheridas a esas partículas siguen siendo activas, cuando se les administra a insectos susceptibles, según Tapp y Stotzky (1998) mencionado por Mendonca et al. (2006) las toxinas pueden llegar a permanecer con efecto insecticida al menos por 234 días, esto puede traer efectos negativos a insectos no blanco.
En cuanto a la afectación que puedan tener sobre algunos hongos saprófitos del suelo Oliveira et al. (2008) no encontró diferencia significativa entre el desarrollo de hongos saprófitos sobre suelos inoculados con las toxinas y los no inoculados.
Sin embargo, otro tipo de hongos que forman simbiosis con las plantas – las micorrizas–son organismos no blanco, que según Liu 2010 se ven afectadas por las toxinas Bt remanentes en el suelo. Así mismo, Castaldini et al. (2005) en su estudio donde incorporaron biomasa de maíz Bt al suelo demostró la colonización de las raíces de alfalfa por micorrizas fue significativamente menor que en suelos donde no incorporaron.
Sin duda alguna el tema de las consecuencias que puede traer el uso de organismos transgénicos al ambiente es de mucha discusión. Siempre habrá opiniones en pro y en contra de su uso, pero debe imperar la razón, la razón basada en conocimiento científico derivado de estudios objetivos que pongan de manifiesto las ventajas y desventajas del uso de transgénicos, que nos ayuden a tomar la mejor decisión con respecto a su utilización.


Bibliografía consultada
Castaldini, M.; Turrini, A.; Sbrana, C.; Benedetti, A.; Marchionni, M.; Mocali, A.; Fabiani, S.; Landi, F.; Santomassimo, B.; Pietrangeli, M.; Nuti, N.; Miclaus, M.; Giovannetti, M. 2005. Impact of Bt corn on rhizospheric and soil eubacterial communities and on beneficial mycorrhizal symbiosis in experimental microcosms. Applied and Environmental Microbiology 71:6719–6729.

Cheeke, T. 2012. Effects of the cultivation of genetically modified Bt crops on nontarget soil organisms. 154-215 pp. In: Wall, D. Microbial Ecology in Sustainable Agroecosystems. CRC Press.

Hilbeck, A.; Moar, W.; Pusztai-Carey, M.; Filippini, A.; Bigler, F. 1998. Toxicity of Bacillus thuringiensis Cry1Ab toxin to the predator Chrysoperla carnea (Neuroptera: Chrysopidae). Enviromental Entomology 27 (5): 1255-1263.

Liu, W. 2010. Do genetically modified plants impact arbuscular mycorrhizal fungi? Ecotoxicology 19: 229-238.

Mendonca, L.; Melo, I.; Valasdares, M.; Anyango, B.; Siqueira, J.; Van Toan,P.; Wheatley, R. 2006. Non-tarjet and biodiversity impacts in soil. pp. 223-233. In:Hilbeck, A.; Andow, D.; Fontes, E.E nvironmental Risk Assessment of Genetically Modified Organisms.CABI Publishing.

Oliveira, A. P., M. E. Pampulha, and J. P. Bennett. 2008. A two-year field study with transgenic Bacillus thuringiensis maize: effects on soil microorganisms. Science of the Total Environment 405:351–357.

Ortega, R. Maíz transgénico: riesgos y beneficios. s.f. Revista Universidad de Sonora. 41-43 pp. Disponible en: http://www.revistauniversidad.uson.mx/revistas/22-22articulo%209.pdf
Salvatore, A. 2002. Effects of transgenic (Bt) crops on natural enemies, 234-236 pp. In: Pimentel, D. Encyclopedia of Pest Management. CRC Press.


Sánchez, T. 2008. Plantas transgénicas. Disponible en: http://www.uned.es/experto-biotecnologia-alimentos/TrabajosSelecc/TrinidadSanchez.pdf






martes, 21 de enero de 2014

Una Revolución Personal: La Coherencia


Carlos Ml. Muñoz J.



Los movimientos sociales están evolucionando gracias al proceso globalizador (redes sociales, etc.) de una mejor manera para llevar a cabo la difusión de los mensajes en pro del cambio, parece que ya no es tan necesaria la presencia de los individuos en determinado lugar, en contacto contínuo, organizándose, la tecnología y la misma interconexión permite coordinar acciones entre grupos sociales que se interconectan hoy dentro de una red heterogénea; todos, luchando por los mismos ideales, tratando de construir un nuevo mundo.

Es claro que la estrategia social debe de seguirse organizando en pro de ideales comunes, para coordinar los esfuerzos que lleven a constituir ese Mundo Mejor, sin embargo, a éstas alturas de la Historia, la mayoría de las personas convergen en ideales comunes (ideas para una sociedad justa, equitativa, solidaria, etc.), esas ideas que son las que en suma proponen todas aquellas personas que desde todos los rincones del Mundo, hacen su aporte ya sea: Cuidando el Medio Ambiente, Promoviendo los Derechos Humanos, Reclamando Justicia Social, Defendiendo a las Minorías, Reclamando la Democracia, Promoviendo Estados Justos, Promoviendo la Solidaridad, Promoviendo El Altruímo, etc.; éstos ideales comunes considero (como gran premisa de éste escrito) ya están interiorizados a hoy, en la mayoría de las personas dentro de su filosofía personal, la cual finalmente, es conformada por las costumbres, tradiciones, obligaciones morales y éticas, de las que en el transcurso de su vida han aprendido; es interesante notar que éstos principios además de provenir desde filosofías humanistas, son evidentemente promovidos, y desde hace mucho tiempo, gracias a la difusión de normas morales y éticas desde las doctrinas religiosas.
La religiosidad, dígase, musulmanes, judíos, brahmanistas, zoroastristas, cristianos, entre otros, casi en su mayoría, las doctrinas que se transmiten, obedecen a los mismos principios de: Justicia, Solidaridad, Equidad, entre otros. Evidentemente, no son dueñas de una postura tolerante y definen los conceptos según la interpretación de cada doctrina, pero por lo menos convergen a ideas que si se ponen en práctica de una manera correcta, debe de llevar ésto, a la coordinación de acciones positivas de parte de la sociedad.
Apartado de la religiosidad, el pensamiento gnóstico y el ateo, impulsan estrategias de convivencia que en suma son coherentes con los mismos ideales, solamente divergen en cuanto a las ideas del respeto a una divinidad. Ambos pensamientos son profundamente científicos, lo que hace que logren observar la vida desde una perspectiva objetiva, sin considerar opiniones subjetivas, lo que les favorece que su crítica sea muy válida.

La sociedad que promueve el Nuevo Mundo, esa sociedad que es la suma de todos los movimientos sociales que heterogéneamente forman una masa coposa (alrededor del Mundo), es la que se mueve en los principios de: Solidaridad, Respeto, Tolerancia, Equidad, Defensa de la naturaleza, etc.; a lado de ésta, camina otra que no se mueve buscándo éste ideal; ésta otra, es la que se mueve bajo las ideas mercantilistas (egoísmo, individualismo, darwinismo social, etc.). Es válido observar que la “otra sociedad” se mueve en increíble incoherencia con los principios que ha heredado su formación religiosa y ético-moral, o en algunos casos en contradicción con un pensamiento racional. Como antes observé, las morales y éticas que provienen desde las doctrinas -sea cual sea-, se fundamentan la gran mayoría en los mismos principios de solidaridad, justicia, equidad, y las más, se les agrega grandes destellos de tolerancia.

Observado lo anterior, es posible deducir que de pleno toda la sociedad no actúa coherentemente con sus principios, que en suma, son los que motivan los actos de todos los individuos que gozamos de una condición de libertad plena; si la mayoría de la sociedad actuara en coherencia con lo que le ha heredado su Cultura, no existiría otro resultado más que una sociedad promovida mayormente por los principios “buenos” y la misma, sería mayormente correcta.

Así pués la clave de la Nueva Revolución, me parece, no está en las grandes organizaciones sociales que se destaquen por su idealismo o por su lucha contínua, desinteresada; la revolución se encuentra a un metro de distancia, en las acciones individuales de personas que muy atinadamente, actuando en coherencia con sus normas personales de vida, promoverán esa sociedad justa, solidaria y equitativa con la que éste Ser Humano, hace miles de años sueña. Será la suma de todas esas acciones, que podrán ser grupales o individuales, lo que determinará el camino de nuestro futuro. Como se vé no es un camino difícil de comprender, solamente necesitamos poner en praćtica la tarea de vivir en coherencia con nuestras más preciadas normas de vida, que seguramente todas están de alguna u otra forma ligadas a la norma magna de la Justicia.


Lo correcto.


Actuar correctamente, debe de ser cosa que se piense y se reflexione profundamente, ésto no puede partir de la opinión personal que nos ataca ante tal o cual situación, la “cosa correcta”, diría un jurista, se aplica para nosotros los seres humanos desde una medida muy amplia, entiéndose como amplio, todo el universo del conocimiento que existe ante tal o cual tema.

Actuar, se parece a juzgar, nada más que sin la posibilidad de atacar a consciencia a tal o cual situación. Actuar se acompaña con el principio humano de la libertad, que le obliga de previo ante cualquier situación de la vida (al ser humano), a convertirse en el absoluto responsable de sus actos; tal condición, implica, que nunca podremos justificar tal o cual acción debido a que no se nos es posible, a menos de que estemos obligados de vida o muerte a actuar, obligarnos a hacer ésta o la otra cosa.

Ante éste panorama, como ser humano, mi acción debe de ser sumamente responsable para conmigo mismo, dicha acción debe de implicar que “yo” en un sentido ABSOLUTO, avalo cualquier decisión que lleve a cabo. Dicha naturaleza, no aplicaría por ejemplo para androides (robots humanos), con una tarjeta de memoria que le hace actuar de tal o cual forma; como nosotros seres humanos (pensantes), somos capaces de racionalizar cualquier decisión, tal escenario androideano no nos describe.

Lo correcto, entonces, como seres humanos, parte de la visión de Justicia, la cual intenta encontrarle una solución al gran problema de la Humanidad sobre conocer la respuesta de ¿qué es lo bueno? y de ¿qué es lo malo?, que a su vez parte de de la necesidad de ordenar en un sentido COHERENTE las acciones humanas de todas y todos nosotros; ordenarlas (nuestras acciones) de manera que sean para el beneficio común de la sociedad. Dicha visión de Justicia, muy resumidamente, es el resultado de la retroalimentación que han heredado siglos de Historia dentro del pensamiento humano universal; despúes de muchos Imperios, esclavitudes, batallas, dogmas, mentiras, y pensamientos reveladores (positivos), nos empujan como a una pequeña barquita que es llevada por el mar, a la arena de nuestro presente.

Nuestra interpretación de lo correcto (la Justicia), por lo tanto, no se puede resumir de buenas a primeras, en palabras llenas de un sentido personal, donde abarquemos dentro de nuestros argumentos, lo que a nuestro parecer es la realidad (la verdad); comúnmente estaremos obligados a actuar conforme a nuestro criterio. Si queremos actuar conforme a lo que nuestra Historia dicta como Justicia, de manera muy sabia, debemos de someternos a un estudio meticuloso del pasado, recordando los escenarios, debatiendo las dudas, debatiendo nuestras verdades, para después de un examen exhaustivo, y después de presentar justas pruebas, en ese momento, como buenos jueces, podamos estar en la capacidad de emitir criterio alguno, de manera que opinemos, en la medida de lo posible, correctamente.

No creo prudente, por lo anterior, previo a cualquier decisión nuestra, arrancar al pasado de golpe o tacharlo con un línea, solo por que como seres humanos llenos de ego, nos gusta tener la razón. No creo prudente, además dejar excluidos a cada uno de nuestros antepasados, que de la misma manera vivieron, le contaron a sus hijos sus historias, soñaron con mundos mejores, con derrotar las cadenas que les imponían Imperios -omnipotentes-; no creo justo arrebatarle ese derecho que tienen hoy a debatir nuestra verdad, a recomendarnos muy sabiamente cual es nuestro camino.

La intención de éste apartado, es aclarar que comúnmente asociamos "lo correcto" con nuestra manera de pensar, que si bien es una consecuencia de años de vida, ésta, a menos de que razone en un sentido COHERENTE con la Historia y el Conocimiento, dejará por fuera de nuestro elaborado criterio, razones objetivas que se alinien con la realidad.

Considerar criterios subjetivos (muy personales), puede derivar en acciones incorrectas, perdiéndose así nuestra intención de ser responsables con nuestros actos. Ésto duele barbaridades; duele por cuanto muchas y muchos (pobres y miserables que se somenten al látigo que les hereda la historia), e inclusive nuestra propia sociedad, dependen del buen razonamiento, de la buena conclusión (criterio) de parte de nosotros. Esa depuración, finalmente, de lo que creemos correcto es generada por la investigación; dicha conclusión no cree en mentiras, dicha investiga mas allá de lo que dicen, dicha conclusión duda de todo y solo creé en el conocimiento, que viene a páginas, a preguntas, a certezas nuestras no de nadie; certezas como Siglos de Historia, certezas como pruebas absolutas de la verdad.

Actuaremos correctamente, si interpretamos la verdad en éste sentido.


La Justicia (Política).

La Justicia recoge nuestras acciones las analiza y las somete a su criterio. Ese criterio lo emite en el marco del desarrollo evolutivo de la Sociedad Humana; en el marco de tal complejidad de las relaciones humanas, intenta orientar, como se dijo en el apartado anterior, coherentemente, las acciones mayormente correctas que deben de ejecutar los individuos.

La Justicia, sin embargo, no es exactamente ese criterio humanizador que objetivamente vela por la Igualdad entre los individuos, puede asociarse ésta, con las intenciones que han tenido los políticos a través de la historia, en cada coyuntura, dígase: la Democracia Griega, la República Romana, el Imperialismo, la Edad Oscura del Siglo XV, los Estados Nacientes del Siglo XVI, las Monarquías de los Siglos XVII- XVIII, y las Nuevas Democracias que nacieron en el marco de Estado Liberal en el Siglo XIX; se puede decir que éstos políticos que tomaron parte en la dirección de éstas sociedades, adecuaron su Justicia a las intenciones de conservar su poder, de manera que evitaron la promoción de la libertad absoluta de los derechos de todos los individuos, otorgándoles en cambio, garantías mínimas como el acceso a los servicios públicos previo al pago de un tributo o impuesto. De alguna manera esa voluntad que ellos imponían, a eso se le consideró Justicia.

No podemos olvidar los esbozos filosóficos que se han hecho a través de la Historia desde los Imperios Orientales, de éstas culturas que poseen gran cantidad de sabiduría, de principios morales y éticos, hasta las filosofía desarrollada de la misma Grecia de Sócrates ó en la filosofía moderna, donde en el marco de una Sociedad Ilustrada, se diera paso a la obsolescensia de las creencias teístas (Dioses), marcando así la evolución hacia un nuevo ser humano cientifista, que buscó por sí mismo la verdad de las cosas. Bueno, éstos esbozos filosóficos, proponen la libertad del individuo, libertad como derecho, libertad como “justicia” ante las barbaridades que sus gobernantes cometían contra ellos.

Así pués, más cercano a nosotros, desde mediados del Siglo XIX Marx proponía la Justicia Social, el derecho de todos, el derecho del proletariado, de la clase trabajadora frente sus detractores la clase empresarial burguesa; éste también es un ejemplo de la búsqueda de la Justicia, que se busca similar a siglos anteriores, como respuesta a una opresión en contra de los menos favorecidos.

La Justicia Política, entonces, se puede decir que ha variado moderadamente según la perspectiva ideológica de quién la ejecute; en primera instancia podríamos creer que existe una Justicia la cual ha sido, todas las normas adoptadas por los poderosos para hacer que la ley de alguna forma trabaje para que ellos puedan mantener el poder; ésto, visto de una perspectiva realista en la que puede converger el pensamiento de Foucault, Hobbes, Maquiavelo, filósofos que entienden el poder, no como un vegamen, si no, como una realidad que actúa si es cómplice con los intereses reales de poder gobernar una sociedad, es una posición muy conveniente para evaluar la Historia y la Justicia, por que al tenor de la pruebas (que nos brinda la Historia), evidentemente no existe una relación igualitaria entre gobernantes y gobernados, lo que existe es una relación vertical entre los menos poderosos con respecto a los más poderosos.

En un sentido idealista, en otra instancia, existe una lista de filósofos como Kant, Sartre, Rousseau, etc., y de maestros como Jesús, Buda, Zoroastro, etc., que proponen que efectivamente, sí existe la posibilidad de que se logre una relación igualitaria ente todos los seres humanos de manera que los gobernados puedan relacionarse igualitariamente con sus gobernantes; ésta tesis, a hoy, es la que ha logrado construir el Estado Democrático como le conocemos, en el que a partir de la conformación de una asamblea de ciudadanos, ésta Asamblea, representa el poder del Pueblo.

Entonces, la Justicia, ese gran diamante que todas las sociedades desean poseer en sus manos para vivir en un “justa” conviviencia, se torna, a partir de la complicidad humana, como algo difícil de obtener, pues la misma representa las intenciones en algunos casos de políticos de que sus ideales personales sean los que se cumplan y en otros casos la realización del pensamiento de Justicia que acompaña a la Democracia (Contrato Social: Rousseau).

Bueno, entonces en el marco de todo éste conflicto, al que se le podría ubicar como teórico-práctico, debe de concurrir que exista la verdadera forma efectiva de la Justicia, por que no podemos quedarnos divagando entre las páginas de la Historia, y nunca por la razones antes citadas, llegar a concocer por lo menos de lejos, la verdadera Justicia.

La intención de la Ley (Montesquieu), es componer de la mejor manera las relaciones humanas de los individuos entre los mismos individuos y de los individuos con el Estado, y además de éstas formas básicas, las relaciones entre los grupos sociales con ellos mismos, con los individuos y con el Estado. La Ley entonces, es la dimensión escrita de la Justicia, es en donde todo éste conflicto filosófico entre realismo e idealismo converge de manera que se dictan normas para componer las relaciones humanas, de una manera coherente.

A la Justicia, se le puede observar gracias a la Ley, en torno a ella es que podemos debatir los acontecimientos que han sucedido a lo largo de la historia, podemos observar con fatalidad cómo hace siglos la esclavitud fué algo justo, y de la misma manera, observar con grato regocijo, cómo a hoy existen los Derechos Humanos, que significan la protección más grande para el respeto de la integridad humana, entre otras cosas, reconoce el Derecho de la Libertad de todos los hombres y mujeres. Sea la Ley que sea, ésta será la que observe el comportamiento de la sociedad; entonces, podremos a partir de tales observaciones criticar la forma en que se imparte de la Justicia.

La Ley, empero, cuya imparcialidad intenta componer un sistema equilibrado, y en cuyo espíritu yacen hoy redactadas muchas normas coherentes con los intereses de una sociedad correcta, posee dentro de sus características intrínsecas, una que es una gran debilidad, ella (La Ley), es interpretada por personas (Jueces), mismas, que poseen la característica de poder cometer equivocaciones y/ó de juzgar para su conveniencia, por lo tanto, al estar interpretada (La Ley) por las mismas personas, queda de alguna manera limitado su sentido de objetividad y su eficiencia. El paso de los siglos nos lo ha demostrado, y nuestro presente también.

La Justicia, sin embargo, más que una Ley que pone en práctica su fisolofía, que es capaz de juzgar acciones humanas, es un ideal, un ideal que se necesita para que nuestra errada humanidad, intente encontrar la luz al final del túnel, luz que nos la ha opacado ese ansioso deseo de PODER que es el máximo cómplice de todos los desastres que hemos cometido y seguimos cometiendo.

Observado lo anterior, considero que en el caso de que la Justicia no tenga la capacidad total de dictar y ejecutar las mejores normas, entonces, quedará en manos de nosotros mismos poder sugerir el camino por el que debe de caminar nuestra sociedad; a la luz de los principios que individualmente profesamos, esa incidencia en la aplicación coherente de nuestras acciones con nuestros principios, puede iluminar el camino, un camino que los demás que no le comprendan, necesitarán observar pero en las acciones de otros; como ejemplos vivientes de nuestra justicia, podremos ser nosotros mismos los jueces que interpreten cuál debe de ser la SOCIEDAD CORRECTA.




Nuestra Responsabilidad.

Lo que he intentado exponer a lo largo del escrito gira en torno a una razón común, gira en torno a que todas las acciones tienen un responsable, se llama nosotros mismos, son nuestros actos, que se han multiplicado durante siglos de historia los que componen a hoy, nuestro presente. Es entonces evidente, que nos debe de preocupar lo que hacemos pues dichas acciones nos llevarán a consecuencias. Nuestras acciones parten de cosas simples hasta complejas, parten del cotidiano sobrevivir a la intrincada sociedad, somos individuos que poseen una cartera amplia de acciones; todas ejecutándose difúsamente por toda la sociedad, construyen la Sociedad.

Los actos que consistan en promover principios coherentes con lo correcto, serán los que beneficien nuestra convivencia de una manera saludable, los otros actos que se asocian con el poder, la avaricia, el deseo de poseer cada vez más, producirán Mundos desiguales, torpes, como en el que hoy caminamos.

Claramente, debemos de asumir una responsabilidad que es la que se asocia con razonar conscientemente si cada cosa que hacemos nos lleva a construir una SOCIEDAD JUSTA, si cada cosa que hacemos nos ayuda a construir sociedades pacíficas que convivan sanamente en armonía. Como se describió antes, nuestros ideales desean que la Sociedad camine en armonía, no desean guerras estúpidas por estúpidas ansias de poder, ni desean poseer más tierra a punta de armas y ejércitos. La responsabilidad a la que estamos sujetos, por lo tanto, es la de actuar coherentemente con los actos que promueven ésta sociedad correcta, así, de esa manera, nuestras actitudes humanas no caminarán en rutas contradictorias como las de ésta sociedad que desea la Paz a través de la Guerra.

Si finalmente, lográramos comprender que las acciones individuales de cada uno de nosotros, todas ellas convergen para convertir la Gran Sociedad, creo que con buena lógica decidiríamos actuar correctamente, que cada cosa lleve a su relativa consecuencia, como cuando salimos de casa y decimos: -volveré pronto-, con esa seguridad diremos, -éste es el camino-.